+52(783)8395136 revista@forotuxpan.com

Chisme

¡Ay, qué tal, mi estimada concurrencia! Les traigo las picantes novedades de un lío en el libramiento Adolfo López Mateos, en la coqueta colonia Azteca de Tuxpan. Resulta que un buen señor de 33 abriles, Luis Ángel N., y su pequeña retoño, Evelyn N. de 11 añitos, protagonizaron un numerito en dos ruedas sin precedentes.

La historia se armó ayer, en la brillante tarde, cuando estos valientes aventureros se aventaron en su motocicleta Italika ft150, pintadita de rojo y negro, como si estuvieran por conquistar el asfalto. Y vaya que lo intentaron, pero el destino les tenía preparada una dosis de «¡ajúa!».

En pleno libramiento, justo a la altura de la calle Galeana, la dichosa moto decidió rebelarse contra sus jinetes y se fueron al suelo cual película de acción mal doblada. ¡Pero no todo es drama, mi gente! Aunque la cosa se veía fea, como una novela de enredos, resulta que las lesiones fueron más leves que las ganas de bailar en un baile de salón.

Los héroes de esta historia llamaron de inmediato a los doctores sobre ruedas, los paramédicos del Centro de Atención Médica Delta, quienes llegaron más rápido que una tortilla calientita en una fogata. Evaluaron la situación con una seriedad digna de un entierro, pero qué alivio, determinaron que no era para tanto.

¡Ahí viene lo bueno! Los «N», padre e hija, se negaron a ser llevados a algún hospital. Parece que tienen más resistencia que un chicle en pleno sol  de verano veracruzano. ¿Qué tal, eh?

El libramiento Adolfo López Mateos se convirtió en el escenario de esta película improvisada, pero gracias a la intervención veloz de los paramédicos, esto no fue una tragedia shakesperiana. ¡Menos mal!

Hagamos un brindis simbólico por esos servicios de emergencia, que aunque llegaron con las luces y la sirena, no tuvieron mucho trabajo más allá de hacer acto de presencia. Pero oye, que se note que estamos bien preparados, ¿verdad?

Y como moraleja de esta comedia sobre ruedas, las autoridades nos recuerdan que hay que respetar las reglas del tráfico y ponerse el casco, el chaleco y lo que haga falta. ¡Que la seguridad vial no es cosa de juego, compadres! ¡Cuidado en las calles y que la suerte los acompañe siempre!

Comentarios de Facebook