Misterio en el Oxxo: Conductor borracho desafía a la gravedad y escapa del caos nocturno

¡Órale, mi gente! Resulta que el domingo, en plena madrugada, una camionetita con su conductor bien alegre, bien contentote, decidió hacer su propio show de choques. ¡Pero agárrense, que esto está más movido que película de ficheras!

Resulta que esta joya sobre ruedas se dio tremendo beso con el barandal del Oxxo que está entre el Infonavit Tenechaco y la Federico García Blanco. Y no nada más eso, ¿eh? ¡No, no, no! La camioneta se aventó un clavado al vacío y, como si fuera lucha libre, le metió un buen golpe a un Volkswagen que estaba tan inocente, tan tranquilote, estacionado por ahí. ¡Pero qué crueles son los caminos de la vida, compadres!

Dicen que el pobre Volkswagen quedó más desfigurado que la reforma educativa. ¡Ay, bendito! El conductor y su camioneta, ni tardo ni perezoso, decidieron hacer como que la virgen les habló y se largaron de la escena del crimen más rápido que corriente de agua. ¡Vuela, vuela, palomita!

Pero eso no es todo, mi gente. No contentos con el desmadre ya armado, se fueron a romper el barandal de la escalera del Oxxo, como si estuvieran en una película de acción. ¡Y ni los de tránsito se enteraron, oiga! ¡Están más perdidos que cucaracha en baile de gallinas!

Y para colmo, los Directivos ojayos del Oxxo nomás no quieren soltar los vídeos. ¡Ahí te hablan! ¡Que no se hagan los occisos, compañeros!

Así que ya saben, amiguitos, manejen con cuidado porque la vida no retoña y, si no quieren acabar como la camioneta, mejor váyanse derecho. ¡Cuidado en las curvas y en los Oxxos, que ahí hasta las camionetas se ponen borrachas! ¡Hasta la próxima, bandita!