Taxista desata caos en la esquina de mangos: Ana en la policlínica, pero estable como un equilibrista…

¡Pues mira nomás lo que pasó en Tuxpan, compadres! Resulta que la señorita Ana, una chiquilla de 31 abriles, residente de la colonia Manlio Fabio Altamirano, se aventó un paseíto en su motocicleta por la avenida nacional esquina con la calle mangos, allá en la colonia Rafael Murillo Vidal de la congregación de Santiago de la Peña. ¡Y se armó la trifulca!

Resulta que, en medio de ese viaje, un taxista, sí, el del taxi, no se le ocurrió mejor idea que chocar contra la pobre Ana, ¡zas! ¡Pum! ¡Estacazo! Y como uno no puede detenerse en medio de una noticia, la chamaquita terminó arrollada y más arrugada que un billete de a 20 después de la Expo Tuxpan.

Afortunadamente, y eso sí que es importante, la salud de la Ana no se fue de pinta, ¡gracias al cielo! Aunque sí le quedaron unas contusiones aquí y allá, como cuando uno juega lotería y le toca pura combinación rara. Pero no hay que preocuparse, porque los paramédicos de Cruz Ámbar, esos que salvan más vidas que la abuela con sus remedios caseros, llegaron volando en su ambulancia y la agarraron en brazos. ¡A la policlínica, dijeron!

Así que ahí va Ana, en la ambulancia, parecía estrella de película, ¡qué emoción! Y como quien va de paseo al parque, la llevaron derechito a las instalaciones de la policlínica. ¡A lo que sigue, compadres! Y bueno, mientras Ana se recupera, el taxista debería aprender a manejar como Cantinflas, ¡con estilo y sin hacer tanto alboroto! ¡Ajá! ¡Arre taxi!