Chisme
¡Ahí te va, mi buen! Resulta que antenoche, en el hermoso Tuxpan, Veracruz, algo bien raro sucedió. Una joven enfermera, sí señor, una enfermerita llamada Penélope, ¡y no la de la Rola de Serrat, eh!, se desmayó en plena calle. ¡Ay, ay, ay! La cosa estuvo movidita.
Fue en la esquina de la calle Gabriel Lucio Blanco y la 24 de febrero, por la colonia Anáhuac, donde la Penélope, ¡aguas, no la de la tela!, se desplomó cual película dramática. ¡Qué barbaridad!
La plebita -tiene 18- se alarmó, o sea, sus familiares que andaban por ahí se pusieron las pilas. Al ver que la Penélope no daba señales de «despertar», ¡ay, madre mía!, llamaron a los de la Cruz Roja. Llegaron como balas esos paramédicos, bien uniformados y con su ambulancia al tiro. ¿Y qué hicieron? Pues atendieron a la Penélope, le dieron sus primeros auxilios, ¡arre, arre!, y se la llevaron de volada al hospital IMSS Bienestar.
Por si las moscas, la policía también metió las narices, pero todo bien, no fue un asalto ni nada de eso. Nada de violencia, compadre, solo la Penélope desmayada y la Cruz Roja al rescate. La patrulla siguió haciendo su chamba de cuidar el barrio.
Y aquí viene lo más interesante, mi buen. No sabemos todavía por qué la Penélope hizo su show en plena calle. ¿Andaría mal pasada? ¿Estará embarazada? Nadie soltó prenda sobre su salud ni las razones del desmayo. Esperemos que las autoridades de salud nos cuenten la película completa en las próximas horas. ¡Así que estén al pendiente, raza!